Estrés oxidativo y envejecimiento
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El agua hidrogenada y una piel saludable
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Agua hidrogenada y las lesiones neurodegenerativas
El agua hidrogenada, hidrógeno molecular en el agua potable, protege contra los cambios neurodegenerativos inducidos por lesiones cerebrales traumáticas.
Las lesiones cerebrales traumáticas en sus diversas formas es sin duda un importante problema en nuestra sociedad moderna. Estas lesiones neurodegenerativas pueden transformarse en crónicas y acabar siendo un factor de riesgo para enfermedades comoAlzheimer y Parkinson muy probablemente por influencia directa del estrés oxidativo y la neuroinflamación. Científicamente está demostrada la capacidad del hidrógeno molecular antioxidante en el agua potable (agua hidrogenada) para combatir las lesiones provocadas por el impacto cortical controlado, un modelo experimental comúnmente utilizado de lesión cerebral traumática.
Diversos estudios concluyen que el agua hidrogenada reduce los edemas provocados por el impacto cortical controlado en aproximadamente a la mitad minimizando notoriamente su patología. El tratamiento con agua enriquecida con hidrógeno molecular también invirtió el incremento del grado de oxidación observado 4 h después del impacto cortical controlado.
Estos resultados demuestran que el hidrógeno molecular puede ayudar en muchas de las secuelas de las lesiones provocadas por el impacto cortical controlado y sugiere que podría ser un tratamiento fácilmente administrado y eficaz para el traumatismo craneoencefálico (TCE).
Agua hidrogenada, un neuroprotector contra las lesiones cerebrales provocadas quirúrgicamente
Las operaciones neuroquirúrgicas causan un daño inevitable a los tejidos sanos del cerebro. La lesión quirúrgica directa así como el estrés oxidativo inducido quirúrgicamente, contribuyen a la formación subsiguiente de edema cerebral. Por lo tanto fue necesario comprobar los efectos neuroprotectores del hidrógeno (H2) en un modelo establecido de lesión cerebral quirúrgica, en un caso experimental en ratas.
Más conclusiones sobre los estudios sobre el hidrógeno como neuprotector fueron que el hidrógeno se presenta como una forma efectiva y económica de reducir el edema cerebral causado en procedimientos quirúrgicos. El hidrógeno tiene el potencial de mejorar los resultados clínicos, disminuir el tiempo de estancia hospitalaria y reducir el coste total para los pacientes y para el sistema de atención de salud.
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